Anne with an E

Para esta entrada en la que se supone que debemos hablar de alguna película sobre contenido educativo que hayamos visto, yo me he decido más que por una película (ya que mi cultura cinematográfica no es muy extensa pero la seriéfila sí que lo es) me he decido por hablar de una serie original de Netflix que se llama Anne with an E. esta serie está basada en la famosa novela Ana de las tejas verdes escrita por Lucy Maud Montgomery. 

Tanto la serie como el libro hablan de dos hermanos, Marilla y Matthew Cuthbert, que deciden adoptar a un niño huérfano para que les ayude en la granja familiar en la que vivían. Debido a una serie de peripecias y malentendidos quien acaba en la granja de los hermanos es una niña vivaz y muy inteligente. 

En el caso de la serie, una de las cosas que más llama la intención es el tipo de educación que se les ofrece a los niños. Es mixta y tienen a un solo profesor para todas las asignaturas, algo muy humanista en ese sentido, ya que el profesor tenía que saber un poco de todo en comparación a la tremenda especialización que ahora caracteriza nuestro sistema educativo. 

Y es en la serie también donde se ve la importancia que tiene un buen docente dentro de la vida de sus alumnos. En un momento en la última temporada, los niños, entre ellas la protagonista de la historia, cambian de profesor. Lo que ocurre es que en vez de ser un hombre, como lo era el anterior, aparece una mujer de lo más liberada, por decirlo alguna manera. No lleva corsé y eso es todo un escándalo. Sin embargo, todos los alumnos, especialmente la protagonista y su grupo, se dan cuenta de que es la mejor profesora que han tenido hasta el momento ya que su metodología no es para nada tradicional. Tiene tantos o más conocimientos de los que tenía el profesor anterior, pero los explica y los utiliza de tal forma que los alumnos aprenden más. Por ejemplo, una de las cosas que hacen como clase es crear un periódico, lo que les permite desarrollar sus competencias del idioma y, para las clases de ciencia, no les hace leer un libro sin más, sino que les enseña cómo conseguir electricidad a través de una patata. 

Esto es un pequeño y ficcional ejemplo de la importancia que tiene la metodología dentro de un aula y lo importante que es para que los alumnos se sientan motivados y aprenden a valerse en la vida. 

A continuación, dejo un pequeño clip de ese momento del que he hablado en el que la profesora les enseña cómo se hace electricidad gracias a una patata que espero sirva de incentivo para ver esta maravillosa serie. 



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